Un objetivo importante de un Estado es que sus habitantes disfruten una vida que sea lo más larga y saludable posible. En un país con un sistema de salud que funciona bien, muchas muertes prematuras (de personas menores de 75 años) pueden evitarse mediante intervenciones tempranas de salud pública o mediante una atención de calidad si ya se han desarrollado las enfermedades o afecciones.
En los últimos años, los países de la Región de las Américas han registrado mejoras considerables en los resultados en materia de salud, con una disminución de la mortalidad prematura potencialmente evitable.